viernes, 12 de febrero de 2010

La senda del guerrero.

Desde que comencé con la práctica de las artes marciales, hay algo en lo que siempre ahondo. ¿Qué es lo que motiva al guerrero para hacerse más fuerte? Sé cuales son las vías, las técnicas para ello. He comentado acerca de ellas. Conozco el camino. Sin embargo, el por qué es distinto.

Los valores que han guiado mis actos han cambiado desde que empecé. Al principio era curiosidad. La curiosidad se transformó en perfección. La perfección en devoción. La devoción... se multiplicó a causa de la ira. La ira se transformó en paz. La paz se unió a la devoción, y dió perseverancia. Entonces descubrí el amor, y la suma de todo aquello por lo que había pasado dió protección.

Las motivaciones que siempre han guiado mi mano han sido descubrirme a mi mismo mi verdadero potencial, conducidas por los valores que antes he mencionado. Pero ese potencial puede subrayarse, puede multiplicarse exponencialmente según el valor que le demos. En éste momento, y en prácticamente todos en mi vida, ese valor es el de proteger lo que quiero, por lo tanto, el amor es lo que me guía. Pero para proteger a los demás, primero es esencial poder protegerse a uno mismo.

Sólo he conocido un elemento tan poderoso como el amor para guiar nuestra fuerza más allá del límite. Es el odio. Y si, realmente es muy poderoso, y he tenido el placer y el dolor de conocerlo muy dentro de mí. Corrompe, te envuelve. Pero de esto ya hablaremos en otro momento.

La pregunta real es ésta: ¿Qué determinación tomar?

Seguir el camino del guerrero hasta llegar a ser el más fuerte conlleva sus contras. Si quiero seguir mi entrenamiento para llevarlo al límite, debo abandonar este lugar. Necesito acudir a la cuna donde nacieron las artes que practico, y no es cerca. No es cosa de un mes. Pero es completamente necesario si quiero completar mi entrenamiento.

Por otro lado, la razón de hacerme fuerte es proteger a quien más quiero. Por eso quiero ser el mejor. Y de pronto, sin buscarla, encuentro a la persona. No lo piensas, simplemente lo sabes: Es distinta. Es ella. Sabías que era ella a quien buscabas, pero no sabías cómo era hasta que la tocaste, hasta que la sentiste. Hasta que su mirada fue capaz de atravesar la armadura y verte. Verte de verdad. Sientes que su calidez puede abrasarte el corazón con un soplo, que puede darte toda la fuerza que necesites, pero su mismo toque también puede arrebatártela sin dejar rastro. Y ahora que la encuentras, es necesario abandonarla porque quieres encontrar el mejor método para protegerla. Sabiendo que quizá cuando vuelvas, la hayas perdido para siempre.

Entonces, ¿porqué hacerse fuerte para proteger a la persona que más quieres, si ese camino te llevará a perderla? Tantas veces nos encontramos con situaciones similares, que es imposible saber qué decisión tomar, cual es realmente la correcta. Y es que no hay una correcta, o no correcta. Las medias tintas nunca han sido buenas, y es que cada decisión luego tiene unas consecuencias que pueden ser infinitamente variables y distintas.

Estos días he meditado acerca de esa elección que habré de tomar, más tarde o más temprano... Quizá si ella no hubiera entrado en mi vida esto sería mucho más fácil, pero lo fácil no va conmigo, y ella me ha dado y sigue dando cosas que no habría logrado de ninguna otra manera. Todavía es pronto para decir nada, queda un año y medio, y hasta entonces pueden pasar mil cosas que faciliten o dificulten ésta elección.

El problema es que ya decidí que nada podría hacerme cambiar de parecer en mi camino. La senda del guerrero es triste, pero es la única de momento. Por ello, como escuché en su día:

"Si el pasado es historia, y el futuro es un misterio, disfruta el ahora, pues es un regalo. Por eso se le llama presente."

6 comentarios:

  1. Namaste!!! Me encanto lo que escribiste, muy profundo relamente, gracias por compartirlo. Mucha fuerza interna y un gran espiritu guerrero.
    Gracias por este hermoso espacio que regalas y yo pueda entrar y ser parte del mismo. y hermosa musica de fondo, un rincon de paz...

    Namaste
    Sol

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  2. MANUEL, ahora entiendes el sentido que yo mismo le doy a mi blog "Reflexiones después de la batalla". La vida en ocasiones nos pone en situaciones complejas, difíciles. No es fácil tomar una decisión y, desde luego, no seré yo el que te aconseje nada. Básicamente, porque hay decisiones que solamente uno debe tomar, que solamente uno mismo es quien la conoce en profundidad.

    Hagas lo que hagas, decidas lo que decidas, te deseo que aciertes de pleno. Un abrazo, Manuel, compañero y suerte.

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  3. "Cada vez que se cierra una puerta de felicidad, se abre otra, pero a veces miramos tanto tiempo la que se ha cerrado que no vemos la que nos han abierto".
    "Cuando ya no tiene más remedio que irse, ni siquiera un rey puede llevarse su riqueza y su séquito, mientras que las consecuencias de sus actos le seguirán adonde vaya o donde esté, inseparables como una sombra"

    Estoy segura de que sabrás tomar el camino correcto.

    Besossssss.

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  4. Hola Manuel,
    Como me gusta leerte supongo que muchos de los que encontramos una forma de ver y vivir la vida en las artes marciales compartimos experiencias, sentimientos, motivaciones.
    Y respecto a esa decisión hagas lo que hagas si existe Amor no importa la distancia, el tiempo, las dificultades. El Amor sabe esperar...
    Tomes la decisión que tomes será la correcta.
    Un besote enorme!

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  5. Sol, muchas gracias. Me alegro de tenerte aquí, espero que sigas encontrando este espacio de tu gusto y puedas perderte en él cuando quieras. Gracias por tu opinión, ¡y bienvenida!

    Jose, creo que comenté tu entrada imaginándome lo que sería sentir algo parecido, pero ahora conozco el sentimiento en mi propia persona. Ciertamente al final la decisión es sólo mía... esperemos que sea la correcta. Gracias por tu fuerza, amigo mío, y ánimo con tu práctica.

    Aniki, muchas gracias por tus sabias citas. Este tipo de lectura siempre me ayuda en mis decisiones, me guían por los caminos. Aún queda tiempo hasta ese momento, pero supongo que he de ir asumiendo que algo debo hacer. Un abrazo muy fuerte.

    Vane, tus palabras son luz. Gracias por ellas, de corazón. Veamos que nos depara el futuro y en qué se convierten estas circunstancias que nos rodean... siempre con la cabeza bien alta y dándolo todo por lo que protegemos. Un besazo.

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  6. muy buenas palabras..se nota que la senda que has comenzado caminar es la del budo,creo sentirme identificado con tus letras porque al igual que tu camino en el "do"

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